España, 7ª Jornada: MARCHANDO OTRO BRONCE

Siete años después de su tercer puesto en los JJOO de Sydney, Maria Vasco volvió a la senda de las medallas repitiendo puesto en los 20km marcha.Beatriz Pascual y Maria José Poves llegaron a meta entre las trece primeras. 

Y cuando la cosa pintaba fea llego la tercera. En el comienzo de la antepenúltima jornada, noche cerrada en España, entre jueves y viernes, la marcha y en concreto los 20 km dio otra alegría. Esta vez fueron las mujeres. Fue Maria Vasco.Hace ya siete años que Maria se apunto a la lista de medallistas en los JJOO de Sydney 2000, exigua lista para España, por cierto. Desde entonces cada cita importante se cuenta con ella a la hora de acumular preseas, pero el éxito no se repetía. Dio al palo en los mundiales de hace dos años, Helsinki, Finlandia, acabando cuarta pero en los europeos del año pasado volvió a tener una carrera de pesadilla en la que se fue hundiendo. Tras ese fracaso en un año duro por la muerte de su padre, la catalana se replanteo su carrera deportiva y su cita japonesa, unos mundiales lejos de casa con el 116 en el dorsal, oportunidad para volver a un podio universal.

Que llegaba ansiosa, cual león enjaulado, se la vio desde el principio de la prueba, incluso desde que llego a la isla asiática y mostraba sus ganas de competir en su Web. Así solo el grupo marchante dejo escapar a una joven de la armada rusa Sibileva, que pagaría rápido su esfuerzo y se hundiría hasta la novena plaza ante un grupo liderado por la española de la gorra roja. Marcha, marcha y más marcha. 15 km y las otras dos rusas hicieron el relevo y se fueron marchando como un tren: Kaniskina(1.30.09) lo hizo hacia el oro y Shemyakina(1.30.41) seguía se sombra por un camino plateado y lluvioso que segundos después telegrafiaba Maria(1.30.47), confirmado su bronce temprano y alejando a la noruega Platzer. Cinco minutos después entraron Beatriz Pascual y Mª José Poves, 12 y 13. No cuentan como finalistas pero si como meritorio, por encima de su puesto por ranking. Además acabaron, que no es poco. Como ejemplo la italiana Rigaudo y la rusa, mejor marca mundial de siempre, Olimpiada Ivanova. Ni siquiera piso Japón la líder del año bielorrusa Ryta Turava. Pero hay estaba Maria radiante de felicidad y sudor matutino, mojada y esplendida dando la tercera presea, cumpliendo los servicios mínimos metálicos que estableció Odriozola. Merecido bronce e ilusiones cargadas hacia el futuro a escribir en tierras lejanas, como lo son Sydney u Osaka: Pekín. Marchando

RESTO DE ESPAÑOLES

Olmedo no paso a la final de 800 tras quedar quinto en la segunda serie (1.45.61), la joven Dolores Checa (penúltima, 4.20) tampoco fue adelante en los 1500. Más suerte corrió Iris Fuentes-Pila que paso con el séptimo puesto gracias a una serie más rápida (4.06). En el Decatlón, tras la mitad de las pruebas disputadas, cinco, marcha en la 24ª posición. Solo su actuación en altura le salva de un día en el que estuvo entre los peores.